El decapado o remojo prolongado se realiza en absorbentes, pañales ajustados y pañales planos. Tiene como objetivo desengrasar, limpiar a fondo y eliminar depósitos en general (que provocan olores desagradables y disminución de la absorbencia) o después de infecciones o diarreas del bebé. También se puede realizar el decapado en la compra de pañales usados para prepararlos a fondo para su uso por nuestro bebé.
¿Cómo hacerlo correctamente?
PREPARACIÓN: Los pañales a remojar (decapar) deben estar limpios (por lo que si los has usado recientemente debes lavarlos primero).
CLASIFICACIÓN: primero tenemos que dividir los pañales según los materiales que se han utilizado para producirlos. 
Los pañales de lana no están sujetos a decapados como tales, ya que están lanolizados, lo que en sí mismo tiene propiedades purificantes para la lana. En casos extremos, la lana se puede lanolizar en caliente (escribimos cómo hacerlo aquí 😉). Los pañales ajustados, los pañales planos y otros absorbentes naturales y sintéticos se eliminan sumergiéndolos durante mucho tiempo en agua con ácido cítrico añadido (sugerimos medio vaso de ácido cítrico para 5 litros de agua).
ENJUAGUE: después del baño con ácido cítrico, ponga los pañales en un lavado normal con un enjuague adicional; es mejor vigilar si todavía hay algo de espuma presente durante el enjuague.
SECADO: la última etapa es el secado.
